gobierno de Mauricio Macri . A contramano de la estrategia que trazó el triunvirato de mando de la CGT , el referente camionero encabezará el miércoles próximo una protesta callejera en el Congreso de la Nación en rechazo de los proyectos oficiales que prevén reformas previsionales, fiscales y laborales.
La convocatoria se resolvió ayer tras un encuentro intersindical en la Federación Gráfica Bonaerense, un gremio díscolo a la conducción cegetista y que integra la Corriente Federal, el bastión que lidera el bancario Sergio Palazzo. Adherirán además a la movilización las dos vertientes de la CTA, que dirigen Hugo Yasky y Pablo Micheli; los estatales de ATE Capital, que lidera Daniel Catalino; los principales movimientos sociales, y cooperativistas.
En paralelo al rechazo de los planes reformistas del Gobierno, se exigirá el pago de un bono de fin de año para jubilados y empleados estatales, y habrá una mención especial para derogar el impuesto que pesa sobre los salarios, un viejo reclamo de los camioneros.
“Los proyectos de ley representan un feroz ajuste sobre los trabajadores, jubilados, pensionados, beneficiarios de planes sociales, pymes y economías regionales”, se planteó en un documento común, en el que figuran dando su respaldo al menos tres seccionales del interior de la CGT.
El plan de lucha que activó el hijo de Hugo Moyano abre una grieta interna en la CGT. Desde hace meses que Pablo se desmarca de la conducción de la central obrera y envía señales desafiantes. No sólo que no avaló la negociación con el Gobierno para consensuar el proyecto de reforma laboral, sino que luego criticó lo acordado.
A pesar de ser el número tres en el escalafón jerárquico, Pablo Moyano no participará pasado mañana de una reunión reservada de la cúpula de la CGT. Se prevé debatir allí una postura común sobre los proyectos oficiales en lo relativo a lo laboral y previsional.
La maniobra de Pablo Moyano incomoda a Juan Carlos Schmid, el referente del moyanismo en el triunvirato de mando. “Pablo es impredecible y está convencido de que este Gobierno está al acecho de las conquistas laborales”, coincidieron colegas suyos de la cúpula de la CGT.
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