No hubo variación en los últimos dos meses en el estado de ánimo de los colombianos. Según la encuesta Gallup Pol para el mes de octubre, el 69 % de los encuestados creen que las cosas en el país están empeorando y un 20 % piensa que están mejorando. Son las mismas cifras registradas en el sondeo de agosto pasado, clara muestra de una ciudadanía cansada de los escándalos de corrupción, que considera que la economía va mal, lo mismo que el desempleo, que sufre por el alto costo de la vida, la inseguridad y el narcotráfico, y que esta vez tiene la percepción también de que la situación frente a la guerrilla ha desmejorado.
Un pesimismo generalizado que, como es de esperarse, golpea al presidente Juan Manuel Santos, ya en el ocaso de su mandato. El 70 % desaprueba su gestión (dos puntos menos que en agosto) y un 26 % la aprueba (un punto más). Por cierto, entre los personajes de la vida pública nacional el expresidente y hoy senador Álvaro Uribe, principal opositor del Gobierno, es el de mayor opinión favorable: 52 %, aunque también hay que decir que la opinión desfavorable es alta: 42 %. Un ítem en el que sale duramente golpeado uno de los protagonistas principales de la campaña electoral de 2018, el exvicepresidente y hoy candidato Germán Vargas Lleras. La opinión en su contra pasó en estos dos meses del 43 al 59 %.
En cambio, a quienes sí les pintan bien las cosas son a sus eventuales rivales en la contienda presidencial. Después de Uribe, el exgobernador de Antioquia Sergio Fajardo es el de mayor favorabilidad (49 %), seguido de Clara López (47 %) y Humberto de la Calle (42 %). Otros de la baraja, como Gustavo Petro, siguen con una opinión desfavorable alta, 51 %, y de los que son independientes, pero considerados de línea uribista, a la que mejor le va es a la exministra de defensa Marta Lucía Ramírez (opinión favorable del 36 %). Lo curioso es que los precandidatos directos del Centro Democrático, el partido de Uribe, al que mejor le va es a Carlos Holmes Trujillo, con una opinión favorable del 20 %, pero una desfavorable del 22 %. Los demás aparecen muy abajo.
Frente al proceso de paz, la percepción que deja la encuesta es la misma que tienen hoy la mayoría de colombianos: la de un país polarizado. Por ejemplo, el 55 % de los consultados considera que la implementación del Acuerdo de Paz entre el Gobierno y las Farc, va por mal camino, frente a un 40 % que cree lo contrario. La gente tampoco cree que dicho acuerdo traerá una mejor distribución de la riqueza en el campo (69 % dice que no), ni que disminuirá la violencia de origen ideológico (68 % dice que no), ni que se vivirá con más seguridad y tranquilidad (63 % dice que no), ni que se encontrará una solución definitiva al problema del narcotráfico (83 % dice que no), ni que las Farc van a cumplir con lo pactado (63 %) y mucho menos que se logrará esclarecer la verdad y reparar a las víctimas del conflicto (67 % dice que no).
Por último, en temas sensibles a nivel de sociedad, seguimos siendo un país conservador. El 78 % está en desacuerdo con legalizar el tráfico y el consumo de drogas en Colombia, el 75 % se opone a la adopción de menores de edad por parte de parejas del mismo sexo y el 58 % está en contra del matrimonio civil entre parejas homosexuales. Vale la pena mencionar también que un 55 % considera que en el país no existen garantías para hacer oposición democrática y un 64 % dice no estar dispuesto a sacrificar parte de la justicia por negociar la paz. Y aunque la opinión desfavorable de las Farc sigue siendo alta (79 %), su favorabilidad llega ya al 17 %, cifra inimaginable hace algunos años.
ELESPECTADOR